miércoles, 7 de marzo de 2007

El indio poeta


Muchos viajeros quedaban despistados cuando cada guía de vagón daba su propia versión sobre el origen del nombre "Puente del Inca". Esto produjo una serie de alucinaciones a pasajeros poco acostumbrados a la altura, que tras escuchar la mentira contada desde muchos puntos de vistas, la imagen acústica resumía las cien palabras en una figura emblemática: estamos hablando del indio poeta. Y en esto coincidía tanto los pasajeros afiebrados del primer vagón como los del último compartimento.
Según una recolección de varios testimonios, hecho por terapeutas contratados para un estudio científico de esta problemática, el informe reveló que cada vez que el tren cruzaba frente a Puente del Inca, un semblante verde y tridimensional, parecido al Patoruzú de Quinterno, evocaba con sus brazos abiertos a las nubes y si bien no hay precisión de lo que decía con sus labios -tampoco nunca se escuchó nada-, todo parecía indicar que estaba orando o recitando un poema a la Madre Naturaleza.
Por tratarse de un hecho que pudiera desprestigiar al Trasandino, ya que de chamuyarse en forma pública este asunto, quizás se perderían muchos turistas con mal de alturas, se prefirió mantener en secreto este informe sobre alucinaciones.
Al parecer, lo que todos veían era un indio sencillo, con una vestimenta coherente y familiar, a la vez muy rico en texturas, de un misterioso color verde -como el de los marcianitos que alguna vez se detectaron en esa zona y que dio origen al nombre del grupo de rock Los Enanitos Verdes-, con una lanza en cuya punta exponía un dorado, listo para ser devorado, y con un pequeño papiro, parecido a una libretita telefónica, hecha con una piedra marmolada, en la que al parecer contenía un sinnúmero de palabras que conectaban el espíritu de este hombre con la naturaleza.Con el tiempo nadie pudo evitar hablar del "famoso" indio poeta y cada vez que el tren pasa por Puente del Inca, todos intentan capturar, al menos, desde el ensueño, la figura emblemática de esa figura de la que mucho se habló y poco se vio.

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